La escuela del siglo XXI requiere de docentes competentes que sean
capaces de diseñar situaciones de aprendizaje acordes a las necesidades de
los educandos de los nuevos tiempos. Ya no basta con el simple
adiestramiento en el uso de técnicas y procedimientos para la enseñanza,
hace falta ir al fondo del asunto y promover una verdadera transformación
de la práctica docente partiendo de las creencias y supuestos que subyacen
en el hacer cotidiano de cada maestro en servicio o en formación.
Por lo tanto, los componentes que deberá considerar el docente para diseñar situaciones de aprendizaje contempla lo siguiente: Propósito de la actividad de aprendizaje; el espacio, ¿dónde?; tiempo, ¿cuándo?; metodología, ¿cómo?; medios, ¿con qué?; sujetos, ¿quiénes? y Evaluación.
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